Tu cuerpo: hombro

Rotura del manguito de los rotadores

¿Qué es?

Es la rotura parcial o total de alguno o varios de los tendones que forman el manguito de los rotadores, siendo el supraespinoso el que más comúnmente se lesiona.

Más sobre la rotura del manguito de los rotadores:

El manguito de los rotadores es un grupo de varios músculos (supraespinoso, infraespinoso, redondo menor y subescapular), cuyos tendones se insertan en el húmero y su función principal es la de estabilizar y movilizar la articulación del hombro. Por su disposición anatómica, el tendón del músculo supraespinoso tiene una zona de paso muy estrecha justo por debajo del acromion, siendo el roce con esta superficie muy común, y de ahí que sea el tendón que más se lesione de los cuatro; además, se ha visto a poca distancia de su inserción en el húmero, que éste tendón tiene una zona avascular, por lo que tiene más probabilidad que el resto de degenerar precozmente.

¿Qué causa la rotura del manguito de los rotadores?

Varias son las causas que pueden lesionar los tendones del manguito de los rotadores, como traumatismos directos sobre el hombro o indirectos por caídas sobre la mano, sobreuso o microtraumatismos repetidos (como puede ocurrir en ciertas profesiones como carpinteros o electricistas, o en deportes como la natación), y por la debilidad que produce el produce en el tendón el propio proceso de envejecimiento.

¿Cómo puedo saber si tengo rotura del manguito?

El fisioterapeuta orientará al paciente al diagnóstico más preciso mediante una buena anamnesis y exploración física, con la realización de diferentes test y pruebas ortopédicas, además de la valoración articular, muscular y la palpación. Se puede corroborar el diagnóstico con diferentes pruebas radiológicas.

¿Cómo puede ayudar la fisioterapia con la rotura del manguito de los rotadores?

Como ocurre en cualquier patología, el fisioterapeuta deberá elaborar un plan individualizado de intervención para cada paciente, independientemente si se ha decidido por el tratamiento conservador o quirúrgico, y centrado en los objetivos de reducir el dolor, mejorar el recorrido articular y fortalecer la musculatura. El ejercicio terapéutico cobra una especial importancia en el tratamiento de esta patología, donde se ha demostrado que un programa de ejercicios prescritos y supervisados por el fisioterapeuta es muy efectivo a medio-largo plazo. Además, hay una batería de técnicas que pueden ayudar al paciente en la recuperación y para evitar recidivas, como la electroterapia, terapia manual, la punción seca o el vendaje neuromuscular.

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